La Casa de las Rejas: Centinela de la Llanura Santafesina

El sol cae implacable sobre la llanura, abrasando la tierra y dejando el aire pesado, casi irrespirable. Un jinete avanza a paso lento por el ancho y polvoriento camino. El cansancio lo vence, cada respiro se siente denso, agotador. A su alrededor, solo horizonte. Nada de civilización.

Agita las riendas para apurar la marcha, pero el caballo se detiene en seco y relincha con nerviosismo. Algo no está bien. Lo
s sentidos del hombre se agudizan. Hay un peligro latente, aunque aún no lo distingue. Vuelve a clavar las espuelas y la bestia retoma el paso, pero el jinete ya no escucha solo el golpeteo de los cascos. Su propio corazón retumba en su pecho. Algo se acerca.

Primero es un grito. Salvaje, inhumano. Luego otro. Y otro más. Pronto, los alaridos retumban desde todas direcciones. El hombre gira la cabeza y los ve: un grupo de indios se acerca a galope tendido, alzando lanzas y agitando el polvo.

No hay muchas opciones. Rezar y galopar.

Se inclina sobre su caballo, acaricia su cuello y le exige el máximo esfuerzo. Tanteando, se desprende de todo peso extra. Pero sus perseguidores son veloces, tranco a tranco le recortan distancia. Lo sabe porque los gritos aumentan su intensidad. No hay escapatoria… hasta que un disparo resuena en la distancia.

A un costado del camino, una imponente casona enrejada se alza como un bastión indestructible. Un segundo disparo rompe el aire y el malón se desbanda. Los atacantes se desvanecen en el horizonte, sabiendo que aquella casa está lista para la batalla.

Dios, o quien sea, estaba atento.

El guardián del camino

Esta fortaleza de la llanura es conocida como "La Casa de las Rejas", "Casa Santarelli" o "Casa Gaitán". Durante años, fue un refugio para viajeros y una línea de defensa contra malones e invasores. Se dice que hasta soldados patrullaban su techo, atentos a cualquier amenaza.

Ubicada en medio de la inmensidad rural santafesina, dentro de la jurisdicción de San Genaro, esta casona es anterior al propio pueblo. Es una de las primeras construcciones levantadas en territorio indígena y testigo de incontables batallas. Su presencia ayudó a expandir las fronteras de la provincia y es una de las pocas que aún resisten el paso del tiempo.

Construida en 1854 por Don Romualdo Gaitán Pérez y su esposa, Doña Baldomera Arce, la casa fue originalmente el casco de una extensa estancia. Su hijo emigró a Rosario para estudiar, pero falleció a corta edad, lo que llevó a la familia a trasladarse a Coronda. Así, la propiedad fue vendida al señor Santarelli, cuyos descendientes la mantienen hasta el día de hoy.

Un legado en pie

En aquellos tiempos, la región estaba salpicada de fortines, como el Fortín de Mauro, hoy desaparecido. La abundancia de arroyos hacía de esta una zona habitada por indígenas, en su mayoría pacíficos, aunque algunos grupos organizaban ataques sorpresivos contra viajeros y pobladores.

De estilo colonial italiano, la casona destaca por sus imponentes rejas forjadas a mano, que aún hoy se mantienen firmes como un recordatorio de su propósito original: resistir.

A pesar del esfuerzo de sus dueños por preservarla, los costos de mantenimiento son elevados. Se logró que fuera reconocida como patrimonio histórico provincial, e incluso se intentó convertirla en museo, pero el proyecto no prosperó.

Actualmente, es una propiedad privada y no se encuentra abierta al público, aunque sigue siendo un símbolo de la historia santafesina.

Un homenaje a su historia

Algunos pueden verla como una casa vieja y curiosa, pero yo veo mucho más: uno de los cimientos de esta provincia. Un lugar donde la sangre y el sacrificio ayudaron a forjar la Santa Fe invencible que conocemos hoy.

Desde mi humilde lugar, rindo homenaje a esta veterana de guerra y a todas las almas que le dieron forma.

✍️ Rafael Theller

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Comentarios

  1. Hermosa historia, muchas gracias por hacerla conocer.

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  2. Que linda y muy similar su historia a la de la casona en la que me crie pero esta está ubicada en el norte de la provincia de Santa Fe

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  3. Genial Rafa! Me encantó!

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  4. Hola
    Tiene información del campo de la familia González Mansilla de San Genaro ? Era un campo extenso y según tengo entendido la Sra Mansilla era descendientes de Lucio Mansilla y de J. M. De Rosas. Agradecería información. Saludos

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  5. Lamentablemente no tengo información sobre el mismo. Me voy a poner en campaña. Gracias por el dato

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